martes, 9 de septiembre de 2008

El abrigo de las rosas


EL ABRIGO DE LAS ROSAS


Cambiaste la sequedad de la hojarasca

que lastimeramente pisoteaba en el otoño;

por una alfombra de pétalos de rosas,

con la magia que dan los colores,


golondrinas de pétalos que regresan

cual si fueran primavera cubriendo,

conteniendo mi retoño en flor.

Pétalos de néctar; son el parpadeo de tus ojos


que traes con tu navío de ternura,

destejiendo este otoño invernal

descolorido sin abejas.


Si los pétalos de las rosas fueran música,

mis oídos serían arpegios de un arpa maravillosa.

Si el silencio de su aroma fuera susurros,

mis oídos soñarían con un reino desconocido.


Tus rosas son glorietas en el viento

que resuenan canciones ancestrales

pentagramadas en arpas de cristal

desplegando capullos de fuerte intensidad.


¡Gracias ¡ por sacar las espinas dolorosas

de las rosas

¡Gracias! Por donar a mis cansancios

el rubor de tus rosas en mi camino

¡Gracias! Por abrigar con pétalos a mi hogar



Mercedes Estela Brito